El estudio de los eclipses está incluido en la interpretación de la Carta Natal, especialmente los pre-natales, ya que ofrecen pistas acerca de las vidas anteriores y misiones de vida de las personas que los tienen, y se aceptan todos, los que sean del tiempo del embarazo como del día de nacimiento de la persona que resulta de tal embarazo, indica además el posible lugar en el que vivió en su encarnación anterior.
Los eclipses indican ciclos que las personas deben vivir, pues el primero abre la puerta y el segundo la cierra, lo importante para el común de la gente es que se le informe cuál es el ciclo, por ejemplo, en las relaciones de familia, si es el catalogado como la “oveja negra”, habrá un eclipse que le indique qué energía debe trabajar para cortar con esa apreciación que hacen de sí, y hacerlo antes de que llegue el eclipse que cierra esa energía, pues de lo contrario, seguirá con esa cruz y de paso acumulará más negatividades en ese aspecto que es muy pesado pues para algunos es duro saber que de su familia reciben maltratos en variadas escalas por ser diferentes.
Existe un mito muy extendido, respecto a los lunares, que tienen aspectos desagradables y características médicamente alarmantes, según dicen que es por mirar un eclipse lunar mientras se está embarazada, y existe una teoría reencarnacionista que indica que son las marcas de su última vida inmediata anterior, en la que se refleja la marca de su muerte, te puedes quedar con la tesis que prefieras, yo pienso siempre que veo a alguien con ese tipo de marca, es que debe verse con un dermatólogo y un oncólogo rápidamente para ver si tiene salvación. El tema de las “Lunas de Sangre” es un término dado al evento para inyectarle dramatismo, pues es natural que en la ruta del encuentro de las luminarias, se den una gama de colores entre los cuales está el rojo, y desde hace unos años le dan ese nombre, que es muy usado en especial en países que tienen algún tipo de conflicto, para implicar que es posible que haya un estallido social o guerra en los días posteriores al evento. Esto me recuerda a la época antigua cuando se daban los eclipses, muy especialmente los solares, y las personas creyendo que el mundo se terminaba, se suicidaban, y otras se convertían a alguna fe o renunciaban a algo que les llamaba su atención, en general, las personas padecían grandes sufrimientos por esto que es un evento natural que deja huellas pero no de la magnitud que se le quiere dar.
No le quiero restar importancia tampoco, solo pretendo que se le dé el lugar que tiene, pues es necesario que se sepa cómo manejar las energías, y que en lugar de renunciar a una vida “pecaminosa” a medias por miedo al final de los días en la tierra, se prepare cada uno para lo que necesitan en su avance en la vida, de modo de tener una elevación espiritual adecuada y que puedan pasar la página a lo que tengan. No es justo que hayas llegado al mundo con tres aprendizajes por concluir, y te vayas con dos más agregados a los tres que no lograste. Es de importancia para cada quien saber qué debe hacer para crecer y ser mejores como humanos y como creaciones de Dios. Al ser en el signo de Leo, lo que interpreto yo es que debemos trabajar el Ego, que es una energía que todos manejamos muy mal, porque el Ego nos hace sentirnos amos del mundo o la víctima más desgraciada de la humanidad, así que ambas caras de la moneda son importantes de sanar con la energía más neutral que se tenga en el ser interior de cada quien, es necesario que se tenga disposición para ello con la convicción de que es lo que se quiere. Nada hacemos si buscamos sanar el Ego pero, seguimos con la misma actitud que deja mucho que desear de cada comportamiento de cada uno. La humildad, la capacidad de razonar, la empatía, la compasión, el amor, el entendimiento de todos en lo que se quiere ser como seres humanos es importante. Tenemos una oportunidad de limpiar al menos un defecto que nos haga estar atados al Ego, hasta el eclipse que corresponda con el cierre de este ciclo. Queda de cada quien lograrlo. Cuéntame qué te parece el tema.
GUÍA DE LOS SUEÑOS.