Si te levantas y sientes el aire pesado, si no pudiste descansar bien, si te pesa caminar por la casa tal vez no estés agotado, simplemente la energía de todas las habitaciones está muy pesada y no fluye correctamente. Lo que hace falta quizá es una limpia de energía.
NECESITARÁS:
Vela amarilla.
Bolsita de tela. (De preferencia verde)
Incienso de sándalo.
Semillas o granos. (Ejemplo: maíz, arroz, frijoles…)
Cítricos. Pueden ser limón o naranja.
Instrumento musical que puedas pasear por la casa. (Pandereta, Campana, tambor, maraca, flauta…)
MANOS A LA OBRA:
Toma tu instrumento musical elegido, sea un pandero, tambor, campana, hasta maracas, si quieres, y haz todo el ruido posible. (YO, prefiero LA CAMPANA)
Recorre cada habitación de tu casa para que la vibración del lugar comience a fluir y deje de estar estancada.
Luego, coloca la vela amarilla en el centro de tu hogar. Puedes poner una mesita pequeña ahí y dejar prendida la vela sobre ella y alrededor de la vela, en forma de círculo, coloca los granos o semillas que hayas elegido para este ritual y coloca también el cítrico elegido.
Luego prende tu varita de incienso de sándalo y ahora haz el mismo recorrido por toda tu casa, como hiciste con tu instrumento musical, pasando de habitación a habitación. Vamos a limpiar la energía de todos lados.
Regresa a donde estés con la vela y termina con la siguiente oración:
«Que nuestra madre tierra naturaleza llene de amor nuestros corazones y dé luz a nuestro entendimiento. Que proteja lo sagrado de nuestro hogar y nos permita habitar en paz. Que así sea y así será».
Repítelo tres veces seguidas.
Al finalizar, apaga la vela y guarda las semillas en un saco o bolsita verde, de preferencia. Llévalo contigo como un gran amuleto durante toda esta estación.
GUÍA DE LOS SUEÑOS.
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